Por Guillermo Tagliaferri ([email protected])
Edición: Florencia Romeo ([email protected])
La Primera D, la última categoría del fútbol de AFA, siempre se destacó por sus clubes humildes, con historias de sacrificios, privaciones y verdadero trabajo a pulmón. Es el caso del Club Social y Deportivo Yupanqui, una de las entidades más representativas de esta divisional, que acaba de conseguir el primer ascenso de su historia y después de 46 años ininterrumpidos en Primera D ahora pega el salto a Primera C.
Alternó campañas buenas, regulares y malas, manteniéndose firme en Primera D desde su estreno en 1976, hasta que este 2022 le brindó la mejor satisfacción futbolística de su historia. Ganador del Torneo Clausura, definió el ascenso a Primera C, con Centro Español, otro club tradicional de la más baja de las divisionales, campeón del Torneo Apertura y tras dos parejos y duros empates 0 a 0, en la ida y en la vuelta, un gol de Lucas Basso en el tiempo adicional.

La publicidad de la TV
Yupanqui, fundado el 12 de octubre de 1935 en el barrio porteño de Villa Lugano, tuvo su momento de fama a comienzos de la década del 2000 por una serie de publicidades televisivas, de Coca Cola, que lo presentaba como el club con menos hinchas del fútbol argentino y marcaba el contraste entre su escasa convocatoria y la gran pasión de esos pocos.
«El club con menos hinchas del fútbol argentino… pero no con menos pasión», era el slogan de aquella recordaba propaganda. En cámaras aparecían futbolistas de aquel plantel y un par de hinchas.
Aquella visibilidad le significó al humilde club un importante ingreso económico y visualizarse no sólo a nivel nacional, sino también internacional. Desde el exterior llegaron solicitudes para conocer detalles de la entidad y hasta para asociarse.
También popularizó el apodo de Yupanqui: Los Traperos, en referencia a que en su tribuna había más trapos (banderas) que personas.
La cancha propia
A fines del año pasado Yupanqui inauguró su propia cancha, ubicada en Ciudad Evita y escenario de su reciente coronación. Anteriormente deambuló, ejerciendo la localía en distintos escenarios alquilados, como las canchas de Sacachispas, en el barrio de Villa Soldati, Savio 80, en Villa Lugano, y Liniers, en General Villegas.
Una fiesta barrial acompañó aquella inauguración del terreno, con la presencia de Claudio Chiqui Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), y autoridades municipales. Y la pelota rodó sobre el flamante césped con dos partidos de exhibición: el equipo local contra una formación histórica de 2014 -que estuvo cerca del ascenso, pero perdió en dos ajustadas finales ante Juventud Unida- y la Selección Argentina Senior contra el Senior de Yupanqui. Y en mayo de este año recibió el primer partido oficial: un empate 1 a 1 con, casualmente, Juventud Unida.

Ese terreno había sufrido la amenaza de okupas, que intentaron asentarse en el lugar tras derribar el alambrado. Sin embargo, fueron desalojados rápidamente y la cancha se convirtió en una realidad.
La sede ubicada en la calle Guamaní, en Villa Lugano, y recostada sobre la autopista Dellepiane posee gimnasio cubierto, pileta climatizada y un jardín de infantes, y también sufrió contratiempos: pérdida de metros cuadrados debido a obras de ampliación de la autopista y hasta un voraz incendio en 1961.

Cuestión de nombres
Yupanqui debe su nombre a la palabra quechua; los jóvenes fundadores del club la eligieron por su significado: «De ti hablará la posteridad«. Yupanqui Basquet Club, ya que ese fue su principal deporte hasta que pocas décadas más tarde el fútbol se erigió en la actividad fundamental, fue su denominación original.
Como todo equipo, de cualquier categoría, Yupanqui tiene su clásico rival: es su vecino Atlético Lugano, club que también participa en el certamen de Primera D y que registra paso por Primera C.
