“Vistiendo sombras”, o la muerte no es una tragedia

Por Guillermo Tagliaferri ([email protected])

Edición: Florencia Romeo ([email protected])

«La soledad empuja a huir de ella a través de los otros que somos o que habitan en nosotros. La idea de la muerte, de la que en solitario no se escapa, se entrelaza con la vida y ambas se confunden. ¿En cuál de los mundos está el sujeto verdaderamente? Ni siquiera él lo sabe«, es la carta de presentación de Vistiendo Sombras, obra de teatro dirigida por Gustavo Andrés Rocco y protagonizada por Lucas Martínez Foresi

Una historia reflexiva y profunda, con momentos de tensión, que arranca con el hombre de Cromañón y los dinosaurios y va desenvolviendo los temores, los monstruos y la inevitable llegada de la muerte, permiten a Lucas Martínez Foresi desplegar un impactante monólogo, cargado de corporalidad y movimientos físicos intensos, acompañados de gestos y acertadas tonalidades de voz para ponerle cuerpo, alma y vida a su conflictuado personaje.

Envuelto en una modesta escenografía, en el Teatro Border, con apenas una silla y una mesa de estilo, el actor, ataviado en una bata de seda, registra picos de intensidad y emoción y le busca sentido a la vida,los preconceptos, la soledad y al inevitable desenlace final. Desde la niñez hasta la adultez, incursionando en preconceptos impuestos, Foresi ratifica su ductilidad actoral. 

En un modesto escenario, con escaso mobiliario, se desarrolla la obra. Foto: @guilletaglia.

Finalizada la función de reestreno, Lucas Martínez Foresi -con papeles anteriores en Torcaza, Muchacho de campo, La inocencia de las mariposas, Los invertidos, Romeo y Julieta 20 años después, ¿Y ahora de qué te difrazás? y las películas Recuerdos del mal y Los mareados, entre otras-, quien, además de ser el único protagonista de la obra, se encarga de la escenografía y el vestuario de Vistiendo Sombras, brindó sus sensaciones de la obra en una entrevista con El Café Diario

El actor, tras la función, entrevistado por El Café Diario.

Un actor movilizado y optimista

¿Cómo se sintió en este regreso, tras la buena repercusión que tuvo Vistiendo Sombras en sus presentaciones del año pasado?

Las sensaciones son muchas. Cuando termino la función, quedo bastante movilizado. Es el sentimiento después de cada función: repito que termino muy movilizado y sensibilizado.

El tema es bastante fuerte, ¿le parece?

Es un tema…, es un tema; eso es lo que diría. No sé si fuerte, porque yo no veo la obra como pesimista, sino al revés, para mí es optimista. Hace más de dos mil años nos metieron el verso de que la muerte es trágica, pero simplemente es otro paso. Eso es lo que pensamos cuando hacemos esta obra.

Y está la referencia a esos miedos, o monstruos como dice en la obra, que todos llevamos incorporados.

Todos esos monstruos los tenemos adentro desde que somos chicos y conviven con nosotros durante toda la vida. De eso tratamos de hablar con nuestra obra.

Hace un trabajo tremendo en la parte física, con un gran despliegue. ¿No termina agotado? 
Es cierto, la parte física es agotadora, pero lo disfrutó un montón. 

¿Tiene algún entrenamiento especial?

Corro en el escenario antes de empezar la obra. Corro, troto, grito… Cada actor tiene su método, el mío es correr. Tanto que empiezo la obra todo chivado, ja, ja.

Hicieron dos funciones en enero, pero también agendaron para febrero, ¿no?

Sí, reestrenamos el 20, nos volvimos a presentar el 27 y en febrero seguimos. 

Vistiendo sombras

Teatro Border

Godoy Cruz 1838, CABA

Viernes de enero y febrero 21.30 

Entradas en la boletería del teatro o por Alternativa Teatral

Lucas Foresi en una parte de su monólogo. Foto: Instagram Vistiendo Sombras.