Qué dicen los padres que están en contra de la presencialidad

Inés Tiphaine ([email protected])

Familias por un Retorno Seguro a las Escuelas ha elaborado el documento ‘Sin salud no hay educación posible’ ante la inminencia de nuevos anuncios respecto a las restricciones sanitarias por el aumento de casos de coronavirus. La iniciativa busca que se cancele la vuelta a las aulas, y ha sido presentada en la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, con un apoyo de 16.000 firmas en contra de la presencialidad escolar.

El documento presentado en contra de la presencialidad escolar.

Se trata de un pronunciamiento para que se restablezcan las clases virtuales en la Capital Federal, impulsado por la negativa del gobierno que encabeza Horacio Rodríguez Larreta a acatar el anterior Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) presidencial.

La situación actual es crítica

Ante el aumento de casos de coronavirus por el ingreso de nuevas cepas, el Ministerio de Salud bonaerense, las empresas de medicina prepaga y el sistema de seguridad social debieron tomar medidas más drásticas a finales de abril para buscar un freno al colapso del sistema sanitario en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde la ocupación de camas pasó en dos semanas del 56,5% al 69,2%, lo que significa que en algunos lugares supera el 90%.

«Estamos estallados», reconoció Arnaldo Dubin, jefe de Terapia intensiva del Hospital Otamendi y miembro de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) en declaraciones efectuadas al diario Página/12. «En la Ciudad de Buenos Aires hoy es una quimera encontrar una cama de terapia intensiva en los hospitales privados».

Dubin advirtió, además, que la situación es similar en hospitales públicos como el Posadas del Conurbano Oeste o el San Martín de La Plata. Luana Volnovich, directora ejecutiva del PAMI, señala que «en CABA no hay camas de terapia COVID-19 para los afiliados y en el AMBA estamos cerca del cien por ciento de ocupación».

Claudio Belocopitt, titular de la empresa de medicina prepaga Swiss Medical, corrobora los datos: «la situación es sumamente grave. Estamos derivando algunos pacientes a hoteles».

La realidad sanitaria al borde del colapso.

Quizá porque los principales medios de comunicación nacionales concentran sus críticas en el tema educativo, Nicolás Trotta, ministro de Educación de la Nación, se vio obligado a comunicar en diáologo con Minuto Uno que 502.000 docentes de todo el país ya fueron vacunados por el COVID-19 y confirmó que se analiza la alternativa de lo que dieron en llamar una «presencialidad administrada» para que el alumnado pueda concurrir dos días a la semana en lugar de cuatro, a fin de disminuir la circulación de la población en el marco de la segunda ola de coronavirus en Argentina.

Clases sí, presencialidad no

Patricia Pines, madre y docente en escuelas públicas de CABA, y referente de los colectivos Vacantes para todos en la escuela pública y ‘Familias por un retorno seguro a la escuela’, argumenta que «es incomprensible la perversidad del Gobierno de la Ciudad. No está escuchando la voz de los expertos, las voces del personal de salud, de todos los hospitales públicos y del sector privado, que advierten sobre el colapso sanitario, la falta de camas, la falta de respiradores y de oxígeno, que es realmente alarmante».

Los docentes temen por su salud y también la de sus alumnos.

Según su punto de vista, «la presencialidad escolar es insostenible. Familias, docentes y estudiantes de todos los niveles denunciamos que es inviable el protocolo, ya que se ha demostrado que a partir de la presencialidad escolar los casos suben verticalmente, sobre todo en estas últimas semanas. Contamos con un número cada vez mayor de trabajadores de la Educación fallecidos y muchos hemos tenido que pasar por la enfermedad alejados de nuestras familias y con mucho temor de no volver a casa tras la internación».

La segunda ola es una realidad

La llamada segunda ola de coronavirus afecta a los docentes al punto que ya hay al menos 33 trabajadores fallecidos y muchos otros ya han atravesado la enfermedad. Pines manifiesta que «después de un año de extremar cuidados fui sólo cinco días a la escuela y me vi obligada a abandonarla. Me contagié y terminé internada con una neumonía bilateral. Dos meses después sigo padeciendo las secuelas, medicada y con un daño en el pulmón. Temí por mi vida, estuve 15 días sin ver ni abrazar a mis hijos y temiendo no volver a verlos».

Valeria Añon, docente de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y de la Universidad de la Plata (UNLP), también forma parte de ‘Familias por el Retorno Seguro a las Escuelas’ y argumenta que «con respecto al cierre parcial tanto de la CABA como a nivel nacional, nosotros pensamos que es incorrecto. En otros países lo que se ha hecho fue cerrar todo y abrir de una manera progresiva. Toda apertura parcial solamente estira el problema, además de la confusión que genera al interior de la comunidad, que ya no saben qué día ir, lo mismo que los docentes».

Los gremios docentes buscan no exponerse y, a la vez, cuidar a sus alumnos.

Al respecto, en su opinión «exponen a los niños, al punto que en las últimas dos semanas la franja etaria que más aumenta los contagios es la de 0 a 9 años». En cuanto a la huelga docente, «es un paro histórico por el nivel de acatamiento y por la extensión del paro. Además, varios gremios lo convocaron al mismo tiempo. Sirvió para garantizar el cumplimiento del DNU dispuesto por el Gobierno Nacional».

«Una enorme cantidad de familias apoyaron el paro, participaron incluso de colectas, rifas o fondos para sostener a los docentes, a los cuales, inconstitucionalmente, se les descuentan los días de trabajo -informa-, y muchas familias no han mandado a sus hijos a las escuelas amparándose en el DNU, pero fundamentalmente por el temor a que se contagien. El porcentaje de ausentismo supera el 80%, según los gremios. Esto muestra una fuerte preocupación por parte de la sociedad».

Virtualidad y dispositivos

Una de los mayores problemas que enfrentan los alumnos si la escuela vuelve a la virtualidad es la carencia de los dispositivos. Debido al cierre del Plan Conectar Igualdad, que entregaba computadoras a los estudiantes, hay alumnos que no pueden acceder a una computadora para asistir a las clases virtuales de la escuela.

Patricia Pines comenta sobre esta problemática que «el de los dispositivos es un reclamo histórico, junto con la garantía de conectividad para todos los niveles y modalidades del sistema educativo. Hasta hace unos años el Gobierno de la Ciudad entregaba computadoras con el Plan Sarmiento, pero en estos últimos años no se entregaron computadoras. Además, el Plan Conectar Igualdad se canceló. Se debería garantizar a cada estudiante inscripto una computadora y garantizarle conectividad».

En un reciente Conversatorio denominado ‘Pandemia, Presencialidad y Vacunación’, del que también participaron el médico Oscar Atienza y su colega Carlos Pecas Soriano, Pines indica que «en esta época del año se empieza a transitar el comienzo del frío y las aulas deberían estar cerradas. Por eso es muy cruel tener las ventanas abiertas con una ventilación cruzada».

En ese sentido, Atienza sostiene que «se agrega la variante de la nueva cepa Manaos del Coronavirus que circula en Argentina. Después de 2 meses de presencialidad, ya hay niños en terapia intensiva y 33 docentes fallecidos. El lunes presenté un amicus curiae a la Corte Suprema de la Nación dotado de todo el sustento científico. Está toda la explicación de cómo se hace un análisis en pandemia, el procedimiento y la justificación que hay «.

El Doctor Soriano marcó reiteradas veces en el Conversatorio que «¿Cuántos muertos necesita el Gobierno de la Ciudad para que dejen de matarnos?«, mientras que la docente Patricia Pines concluye que «ya son más de 30 los compañeros fallecidos, no queremos empezar a contar estudiantes fallecidos».