Popular actor de televisión, acusado de violencia familiar, narcotráfico y tortura

Por Daniel Alejandro Vásquez (Corresponsal en Chile, [email protected])

La película chilena El agente topo tuvo tanto éxito de audiencia y reconocimiento internacional que hasta compitió en los Oscar, entregados en abril último. Tras la obtención del premio por parte de los filmes Una mujer fantástica eHistoria de un oso, Chile tenía la ilusión de repetir y obtener una nueva estatuilla, pero ha sido noticia por un suceso que conmueve al mundo del espectáculo: las acusaciones contra el actor Rómulo Aitken.

La labor de Sergio Chamy, octogenario protagonista de ‘El agente topo’, ha sido reconocida, como también el trabajo de la directora Maite Alberdi, pero el film ha vuelto a ser noticia por un motivo desagradable: Rómulo Aitken, quien cumplía la misión de seleccionar, entrenar y además supervisar la tarea realizada por Don Sergio, ha sido acusado en un libro de reciente aparición de practicar tortura, tener vínculos estrechos con el narcotráfico y de cometer violencia intrafamiliar.

Afiche de la multipremiada película chilena ‘El Agente Topo’

Libro polémico

Los periodistas Javier Rebolledo y Dauno Tótoro acaban de publicar el libro Rati, Agente de la Oficina. Pacificación en Democracia, donde, entre muchas cosas, se acusa a Rómulo Aitken de ser «agente torturador de investigaciones, detective corrupto, protector de narcotraficantes y responsable de quedarse con partidas de drogas», según sostiene el propio Rebolledo.

Rómulo Aitken y Sergio Chamy.

En 1990, 17 años después de haber comenzado la dictadura pinochetista, un plebiscito determinó el fin de ese período. Al año, durante el gobierno de Patricio Aylwin se crea y comienza a operar la llamada «Oficina de Inteligencia», que no era otra cosa que un órgano creado para desarticular a los grupos armados de izquierda, que estuvo en funcionamiento hasta 1993. Vale aclarar que colaboraron con este organismo los Carabineros y la Policía de Investigación (PDI). Rómulo Aitken era parte de esta última.

En ese sentido, el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, el Frente Patriótico Manuel Rodríguez y el Movimiento Juvenil Lautaro, fueron víctimas de amedrentamientos, torturas, montajes y asesinatos por parte de «la Oficina», con el objetivo de mantener una paz social que le permitiera a la Concertación poder gobernar.

Señalado por sus compañeros

Aitken no sólo es acusado por Rebolledo. También lo hace otro exmiembro de la PDI que accedió a dar su testimonio, al señalar que «no tenemos ninguna relación formal de Rómulo Aitken con la ‘Oficina’, pero llegó a cometer torturas a detenidos por sus funciones como policía. Aparece en el libro como parte del testimonio de Jesús Silva, por ser una de las personas a las cuales él vio aplicar torturas a un integrante del Movimiento Lautaro: Carlos Silva Duncan, ‘El Chino'».

Tras la publicación de un libro en Chile, pesan graves denuncias sobre Rómulo Aitken.

Puntualmente el exagente por esos años era parte de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE), que operaba como brazo de ‘La Oficina’. Junto a él se nombra a Jorge Zambrano y a César Rebolledo, ambos, miembros de la misma entidad que también llevaron a cabo las torturas.

Como se consigna en el libro,«los que lo torturaban eran Christian (Jorge Zambrano) -que era el que hacía las preguntas-, César Rebolledo, hombre de confianza de Cancino, y Rómulo Aitken, que en esos tiempos trabajaba en la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE). Rebolledo y Aitken se turnaban».

Más acusaciones graves

En esa época, Aitken mantenía una relación sentimental con Paula Afani, periodista del diario La Tercera, quien denunciaría a Aitken por agresiones, tanto en Investigaciones como en la Justicia.

Se consigna en el libro que «la denuncia por agresión fue complementada con una serie de datos aportados por Afani, quien señaló que Aitken prestaba servicios de protección a narcotraficantes. También aseguró que, en complicidad con su mano derecha, César Rebolledo, mientras se desempeñaban juntos en la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales, BIPE, se apropiaban para su beneficio personal y de modo habitual de fracciones de las partidas de droga y dineros incautados a narcotraficantes durante las operaciones policiales».

Por último, y para dar cuenta del nutrido prontuario, el 7 de junio de 2005 se detuvo al exagente tras las acusaciones de sobornos y faltas a la probidad, delitos que se le investigaban desde 1995. Después de permanecer prófugo de la justicia, finalmente fue aprehendido y trasladado a la Cárcel de Alta Seguridad, desde donde salió el 28 de julio del mismo año al pagar una fianza de $200.000 pesos (26.000 pesos argentinos), tal como lo detallara por entonces la prensa de la época.

Frente a este escenario, el equipo de ‘El Agente Topo’, en la persona de Maite Alberdi, la directora de la producción, emitió una declaración, en la que aclara que no sabían nada del pasado de Rómulo Aitken: «cuando filmamos la película no había ninguna causa vinculada a Rómulo Aitken ni acusación con temas relacionados con derechos humanos«.

Sergio Chamy, protagonista de ‘El Agente Topo’ y Maite Alberdi.

Hasta la fecha toda la información entregada por testigos se encuentra bajo investigación de las autoridades chilenas.