La palabra de dos referentes respecto a la nueva masculinidad que asoma

Por Lola López Quai ([email protected])

¿En qué consiste «ser varón»? ¿Y «ser mujer»? Desde hace un tiempo ya no es tan fácil ni tan automático responder a estas preguntas. Y eso es porque hay un espacio de sentido que busca reformularse. Donde surgen las nuevas formas de estar en el mundo, alejadas de violencias patriarcales muy enraizadas en nuestra sociedad, pero que están siendo puestas es cuestionamiento.

De todo esto y de la nueva masculinidad, el abogado Matías Barboza y el director de cine Ariel Martínez Herrera, que pertenecen al colectivo de Varones Antipatriarcales, dialogan con El Café Diario.

Parte del colectivo ‘Varones Antipatriarcales’.

¿Qué es Varones Antipatriarcales (VA) y por qué nace?

Es un intento de denominar un sujeto político que todavía es muy difícil de caracterizar. Nace porque muchas varonidades nos sentimos interpelades por el feminismo y decidimos poner nuestras interpelaciones y nuestras experiencias con las violencias patriarcales en espacios político afectivos comunes. Lugares que nos permitan construir algo nuevo, integrando la perspectiva feminista y que se refleje, concretamente, en los actos de la vida. Ahí es donde lo personal es político.

¿Quiénes lo integran?

Convocamos a toda persona que quiera aportar al debate desde una masculinidad, sea porque la sociedad lo asignó masculino o porque tiene una búsqueda que le lleve a querer problematizar la masculinidad. La convocatoria siempre está abierta.

¿En qué proyectos o acciones trabajan?

Hay varias líneas de acción. Una son los talleres, abiertos o en articulación, donde tratamos de generar espacios que convoquen a la reflexión colectiva. Otra línea son las varietés: hay un trabajo cultural para cuestionar las performances de la masculinidad y generar un espacio que celebre también las diversidades. Y además una línea de trabajo en articulación con distintos frentes y organizaciones para discutir también la agenda política e instalar estos debates de cara a la sociedad.

¿Cómo es la relación con el feminismo?

Desde nuestro origen estuvimos en diálogo con organizaciones feministas, integramos la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito y realizamos acciones en conjunto con organizaciones mixtas. Es importante para el Colectivo llevar las discusiones, debates y reflexiones que tiene el movimiento, a la interna de la organización.

En Plaza Congreso, los Varones Antipatriarcales participaban de un ‘pañuelazo’, en
uno de los llamados ‘martes verdes’, cuando el aborto legal todavía era un reclamo.

El nacimiento de un nuevo varón

¿Qué significa la nueva masculinidad? ¿Qué significa ser varón?

No lo sabemos. En esta instancia es mucho más importante para nosotres sostener la pregunta e incluso habitar en la incomodidad de la no respuesta, porque uno de los mandatos de la masculinidad hegemónica es justamente el de saberlo todo y nosotros buscamos una masculinidad antipatriarcal. Es decir, que ser varón pase de ser lo que entendemos como masculinidad hegemónica (que es una masculinidad violenta) y empecemos a generar modos colectivos solidarios, más justos de habitar.

¿Cuál es el paradigma que todavía ven más difícil de disolver o cambiar?

La violencia como lenguaje conformativo de subjetividades masculinas. Es un círculo muy difícil de romper porque implica exponerse a la propia violencia machista.

¿Por qué creen que todavía hay tanta resistencia a pensar una nueva masculinidad?

La resistencia es contra el opresor. En todo caso lo que hay es una impermeabilidad de la propia masculinidad a siquiera integrar los cuestionamientos. Una frontera que no puede cuestionarse sin generar una resistencia casi alérgica en forma de discursos de odio que son súper conservadores y reactivos a las críticas, y que obviamente consiguen financiarse fácilmente en las estructuras corporativas del capitalismo, que tienen mucha afinidad con los discursos conservadores.

Los que se resisten, ¿qué argumentos les dan?

Es que los argumentos de cualquier varón que se sienta ofendido por la emergencia del feminismo, o frustrado porque no puede ejercer sus privilegios y encima se muestra violentamente indispuesto a lidiar con su frustración, no valen nada en una realidad donde las compañeras travestis tienen una expectativa de vida de 40 años, o hay un femicidio cada 34 horas en Argentina.

Reunión de ‘Varones antipatriarcales’ en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).

Varones Antipatriarcales es de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). ¿Tienen vínculos con el interior del país?

Sí, estamos permanentemente trabajando en articulaciones con una línea política federal y latinoamericanista. Participamos de la organización anual del Encuentro Latinoamericano de Varones Antipatriarcales, cuya edición 2018 se hizo en CABA y recibió más de dos mil asistentes del país y de Latinoamérica. El colectivo tiene raíces en La Plata, donde también hay varios colectivos activando. Además, por todo el país hay experiencias que, aunque van cambiando con el tiempo, igual las tratamos de sostener con estas articulaciones.