Por Omar Millalonco ([email protected])
Edición: Florencia Romeo ([email protected])
Cristina Montserrat Hendrickse es la primera funcionaria trans en la provincia de Buenos Aires, y una de las personas que ingresó al poder judicial, en gran medida, gracias a dos leyes clave, sancionadas recientemente. Como ella misma dice, esto que viene ocurriendo «visibiliza nuestra lucha y demuestra que tenemos las mismas capacidades que cualquier persona«.
Montserrat Hendrickse reivindica que se lleven adelante este tipo de acciones que comprometen al colectivo trans, un conjunto social que históricamente sufre discriminación y exclusión en distintos espacios. Y no solo laborales, sino también de capacitación.
El hecho de que esta abogada trans haya ingresado al poder judicial, demuestra que «la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires está aplicando la Ley de Cupo Laboral Trans bonaerense, llamada Diana Sacayan y la nacional, llamada ley Lohana Berkins«, nombres que homenajean a dos recordadas luchadoras sociales, manifestó la letrada en diálogo con El Café Diario.
La flamante funcionaria destaca los logros que viene obteniendo el sector, y expresa que todo esto se debe a la gran lucha que vienen sosteniendo muchas personas comprometidas con la causa. Además, espera que en el futuro no se necesiten este tipo de legislaciones para que se incorporen personas trans, sino que las nuevas generaciones lo vivan como algo natural.
Estas legislaciones le permitieron a la doctora, cumplir funciones dentro del sistema judicial, y de esa manera formar parte de los equipos a través del cupo laboral trans, una conquista que se logró en los últimos años, y que ratificó la voluntad y por supuesto la decisión política de incluir en las leyes laborales al colectivo travesti trans, en los organismos públicos, y el sector privado.

«Mi cargo tiene que ver con las dos leyes, la provincial y la nacional. La ley provincial fue aprobada en 2015«, señala Cristina Montserrat Hendrickse, y agrega: «No fue reglamentada hasta finales de 2019, es decir, 10 días antes de que venciera el mandato de la ex mandataria provincial, María Eugenia Vidal, y que estableció un cronograma de días que terminaba de ejecutarse después de su mandato”.
¿Y por qué demoró 4 años? se pregunta Montserrat Hendrickse y da su parecer: «Habría que preguntárselo a (María Eugenia) Vidal; y también preguntarle a Mauricio Macri y a Horacio Rodríguez Larreta, ¿por qué no reglamentan el artículo 5 inciso 6 de la ley 4676 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires? Porque también se establece un cupo laboral para las personas trans en la Ciudad y hoy no está reglamentado”, fustigó la letrada, y recordó que una vez que fue reglamentada la legislación por Vidal, “fue diez días antes de irse, y en la medida que se fueron completando las plazas llegó la pandemia”.
“La experiencia laboral y académica fue muy relevante”
La entrevistada destaca los requisitos que le solicitaron a la hora de presentarse a la convocatoria y explica que la demora en su ingreso se debió más que nada a la pandemia y también por el tiempo que llevó volver a la normalidad: «Una vez terminada la pandemia, se pudo empezar a efectivizar. Y a medida que se producían vacantes, también se incorporaban personas trans. Hasta este momento se incorporaron 1 varón trans y 4 mujeres trans, en distintos cargos como empleadas en el poder judicial«.
La letrada manifiesta que «la experiencia laboral y académica fue muy relevante» para que ella hoy tenga funciones dentro del poder judicial, e indicó que “de acuerdo a mi nivel académico, abogada y egresada de la Universidad de Buenos Aires en 1993, más 28 años de ejercicio profesional, más cursos y posgrados, entendieron que calificaba para el cargo de funcionaria«.
Cabe destacar que los jueces que integran el tribunal número 5 de San Martin, convocaron a Cristina Montserrat Hendrickse, la evaluaron positivamente y gracias a su aprobación, hoy integra el cargo de auxiliar y letrada.

Montserrat Hendrickse señala en la entrevista con El Café Diario que, cuando se dan este tipo de medidas, poco a poco empieza a reflejarse cada vez más «la idea de visibilizar que nosotras tenemos la misma capacidad que el resto de las personas y que lo que diferencia a la mayoría de las integrantes del colectivo trans es que la histórica exclusión les ha obstaculizado acceder a la capacitación, a la educación«.
Y por eso, «lo importante es poder mostrar, que más de tu identidad de género, tu expresión de género, tu orientación sexual, raza o ideología, religión o lo que fuera, todas las personas tenemos el mismo derecho a ocupar funciones y cargos públicos y privados«, expresa la abogada, y completa: «Creo que esta bueno que se visibilice y naturalice, y se rompa ese estigma de que las trans estamos para la noche, para la zona roja o para el espectáculo«.
«Gracias a esto, se nos va naturalizando como cajeras del supermercado, despachando unas mesas de entrada de un juzgado, gerenciando una empresa, un comercio, y en cualquier actividad”, desliza la profesional de Derecho.
Para terminar, la funcionaria dice que «la mayoría de la población tiene un índice de desocupación de alrededor del 6 por ciento y en el caso de nuestro colectivo esa cifra se eleva al 85 por ciento, o sea que hay una desigualdad real de oportunidades y destrato que las leyes de cupo laboral trans, provinciales, nacionales u ordenanzas municipales tratan de revertir y ojalá que el día que no sean necesarias, tengamos el mismo índice de desocupación que el resto de la población«.