
Abogado laboralista, docente y escritor.
Edición: Florencia Romeo ([email protected])
La semana pasada, Lionel Messi, el mejor jugador de toda la historia del fútbol, fue foco de todos los flashes internacionales, debido a que su empleador, el club francés Paris Saint Germain (PSG), decidió sancionarlo disciplinariamente.
Esto sucedió en el marco de una ausencia sin aviso que tuvo el jugador campeón del mundo con la Selección argentina de fútbol, a un entrenamiento del club parisino. La razón de la ausencia se debió a un compromiso contractual que tenía el jugador con Arabia Saudita, en su rol de embajador cultural de dicho país, y que ya había postergado en varias ocasiones.
Lo cierto es que el club, a pesar de la falta de intención del jugador argentino de generar algún perjuicio al PSG, decidió suspenderlo por dos semanas sin goce de sueldo. Es que, aunque cueste creerlo, el mejor jugador del mundo también es un trabajador y fue sancionado por haber faltado a su trabajo.
¿Pero cuán justa es la aplicación de esta sanción de acuerdo con los antecedentes disciplinarios de Messi en el club y la falta cometida?
Claramente, la razón última de la sanción encuentra sus raíces en un encono personal de la dirigencia con el jugador, ya que a lo largo de su estadía en el club francés, Messi ha sido blanco de múltiples criticas. Los cuestionamientos surgieron por la falta de obtención de objetivos deportivos, algo que había sido la gran apuesta del club con la llegada del argentino, como podría haber sido la obtención de la UEFA Champions League.
En este marco, el error cometido por el argentino fue la excusa perfecta que tuvo el club, para exponerlo y generarle molestia. La realidad es que el club utilizó sus facultades disciplinarias para someter a un Lionel Messi que, en realidad, está más cerca de su salida del PSG que de su renovación.
En concreto, la sanción disciplinaria consistió en dos semanas de suspensión sin goce de sueldo, tiempo durante el cual el jugador no sólo no pudo jugar 2 de los 4 partidos que faltan para que el club parisino se consagre campeón de la Liga Francesa, sino que además tampoco se le permitió entrenarse en las instalaciones del club.
Así es como que, como abogado laboralista, en un análisis de los elementos fácticos de las circunstancias, llego a la conclusión de que la entidad de la sanción impuesta es evidentemente injusta y desproporcionada.
Cuando se evalúa una sanción laboral a un trabajador, se deben tener en cuenta los siguientes elementos:
- Antecedentes disciplinarios del trabajador.
- Intencionalidad en la acción.
- Daño generado a la institución.
- Entidad del daño generado.
Lionel Messi no sólo que no tiene antecedentes disciplinarios con el PSG, sino que en toda su carrera futbolística se caracterizó por tener un comportamiento ejemplar y un liderazgo positivo en todos los equipos de los cuales formó parte.
El propio jugador argentino, manifestó su error al creer que tendrían el día libre y, por ende, en su pedido de disculpas públicas se puede inferir su falta de intención de generar un perjuicio a la institución.
Por otro lado, el daño es casi nulo, ya que la ausencia a un entrenamiento no puede ser tomado como algo que genere un daño patrimonial, como podría haber sido la ausencia sin aviso a una concentración y/o partido oficial.
Finalmente, la entidad del hecho en nada justifica que se lo suspenda por dos semanas, un plazo sumamente abusivo, que lo único que persigue es generar un daño a la imagen del jugador, y quitarle mérito de participación en lo que de seguro va a ser una nueva coronación del Paris Saint Germain en la liga francesa.
En definitiva, la sanción es claramente injusta y desproporcionada a la falta cometida por el Messi, incluso hasta impugnable por el propio jugador, que lejos está de tener intención de cerrar su ciclo con conflictos legales con el club que le abrió las puertas luego de su dolorosa salida del Barcelona.
Desvirtuar la naturaleza jurídica del régimen disciplinario del empleador es algo que genera situaciones injustas, como la que viven muchos trabajadores, y en este caso, ni más ni menos que Lionel Messi.

Finalmente, el Paris Saint Germain ha «indultado» a Lionel Messi y, así, el jugador argentino ha vuelto a los entrenamientos. Foto: PSG.